Una Misteriosa Misiva...
Hace un tiempo atrás (y con estas palabras me refiero a hace x lo menos 3 o 4 años) y siendo parte activa de una antigua Red Social, q mas luego desapareció o se fusiono con otra, q respondía al curioso apelativo de “Sónico” (como un “Facebook” pero para gente bonita y en su mayor parte latinoamericana, si bien solía haber usuarias y usuarios de otras partes del mundo) q subían sus fotos y sus amigos y amigas de esta red podían verlas, evaluarlas, y darles un “me gusta” (si las creían merecedoras de esto).
El asunto, sin mas explicaciones y sin dar tantos rodeos q harían interminable esta misiva (q algunos podrían tildar de carente de sentido) es q yo (quién subscribe) era amigo (x la Red Social antes comentada) de una señora, ya entrada en años, y q gustaba de usar sombrero de vaquero (como principal característica distintiva) y cuyo lugar de residencia era la Provincia de Santa Cruz en la Patagonia Argentina y de cuyo nombre no logro recordar (x mas q me esfuerzo), ha pasado un largo tiempo de esto ya y mi memoria ya no es lo q era (sirva esto último como excusa).
Cierto día al revisar los comentarios de algunas de sus fotos, noté q una de las q hacía habitualmente observaciones ponderando, positivamente, su apariencia era su hija, la cual se llamaba (o x lo menos así figuraba) Valeria Martínez, así es como haciendo “click” sobre su nombre pude acceder a su perfil y ver (algunos dirían “espiar”) sus fotos, ya q esta Red Social “Sónico” nunca se caracterizó x ser extremadamente segura (entiéndase q esto último no es un reclamo, solo es un comentario al pasar).
Entre sus fotos, plagadas de imágenes y momentos familiares (en su mayoría alegres x q la mayoría de las personas suben fotos donde la están pasando bien, aunque hay quienes suben todas las fotos q sacaron, a veces cientos, aunque están fuera de foco o al revés, y pretenden q uno las mire cuando la verdad es q el q las subió ni se tomó el trabajo de verificarlas antes de subirlas, q cararotas!!) y paisajes campestres (ya q era una familia terrateniente de aquellas lejanas y frías zonas) había tres (de una serie de paisajes q constaba de al menos diez imágenes de similar característica) q me asombraron x lo q mis ojos estaban viendo (y nótese q esta vez no se trataba de una fémina de singular belleza y ligero ropaje, quizás las condiciones climáticas no hubiesen permitido esto último), estas tres fotos, a las q me refiero, mostraban un objeto de características inusuales, un OVNI (un vehículo de procedencia extraterrestre, sostendrían algunos).
A pesar de q las solicité de manera cortés (lo cual no quita lo valiente, como aseguran x ahí), a la madre de la dueña del perfil, ella me aseguró q no sabía a q fotos estaba haciendo referencia, y se mostró siempre desconcertada y desconocedora del asunto al q yo, con insistencia, solía hacer referencia (al principio de forma velada y, mas luego de forma abierta) y me dijo (quizás harta de mis pedidos y/o preguntas) q se las solicitara a la hija, así lo hice en varias oportunidades, x Mensajes Privados y x Mail, pedidos q no obtuvieron respuesta alguna, y no la culpo, habrá pensado q se trataba de algún “loquito” q le escribía.
Al no obtener respuesta positiva (ni de ninguna índole) las copié (me declaro culpable) y tiempo después se cerró “Sónico” (o se fusiono con otra Red Social, vaya uno a saber) y al no saber q hacer con las imágenes y antes q desaparezcan de forma definitiva (suerte q parecen correr la mayoría de las imágenes de similar características) se las hago llegar a Uds. q sé q se dedican a estos menesteres de capital importancia.
Y así fue como las recibimos (de esta misteriosa manera), y tal cual las recibimos, así las publicamos, como testimonio indiscutible (aunque seguramente habrá quienes las discutan) de esta mas q interesante (para algunos) fenomenología…
Lobsang Arrhenius
Comisión Nacional de Estudios Astroarqueológicos
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