Contactos del cuarto, quinto y sexto tipo...

El caso de nuestra amiga Antua, podría ser catalogado como un contacto de sexto tipo, en el que un ser humano (hombre o mujer, los seres extraterrestres no son sexistas), hace las veces de contactado (del francés “contacte”), no que hace un contacto ocasional con estos seres (contacto del quinto tipo), sino que recibe de forma habitual, algún mensaje (telepáticamente o de otra forma) y este mensaje debe ser entregado al resto de la humanidad. Nótese la diferencia con una abducción (contacto del cuarto tipo), donde la víctima rara vez establece un vínculo con estos seres y parece querer a toda costa evitar el tener otro encuentro con estos seres supuestamente interplanetarios, y la actitud de Antua, que continúa viajando frecuentemente a la montaña donde se agudiza este contacto, para así recibir con mayor facilidad y con la menor cantidad de interferencias posibles (este importante mensaje que estos seres tienen para darnos, podría ser agregado, y algunos dirán, y ¿cómo saber si es importante, si todavía no sabemos de que se trata?, y la respuesta sería que obviamente nadie se va a tomar la molestia de ponerse en contacto telepático, para transmitir, por ejemplo, una receta de cocina).