Elixir rojo...

La menstruación forma parte de los componentes de muchos hechizos de atadura sexual, desde tiempos inmemoriales. Es muy conocido el hecho de que históricamente, en muchas culturas antiguas, dar una bebida con una pequeña parte de la menstruación era parte de una ofrenda (o sacrificio) que hacían las sacerdotisas, de cultos a Diosas, a los guerreros (para potenciar su energía y facilitar su regreso) que marchaban a guerras de conquista que pululaban en aquellas lejanas épocas (al igual que en estas y si a pesar del tiempo pasado los seres humanos siguen enfrascados en guerras y no evolucionaron en ese sentido, bien pueden tomar menstruación, aunque algunos tilden a esta costumbre de asquerosa y al mismo tiempo den la bendición a matar a otra persona, como si eso fuera un hecho hermoso y digno de aplausos). Obviamente no es recomendable diluir esta menstruación en alguna bebida alcohólica ya que es posible que se anulen sus efectos, si los tiene, no es menester explicar el porqué, pero igual voy a hacerlo, ¿Cuándo uno se corta y le sangra, que se pone en la herida? alcohol, dadas sus propiedades antisépticas. También es recomendable diluir una gota de menstruación en por lo menos un litro de jugo (sé aconseja utilizar un liquido de color rojizo, como la granadina, ya que este color esta asociado con la pasión) ya que este “elixir” se potencia al diluirse, y si se usa mucha cantidad de liquido menstrual pierde su deseado efecto, si es que lo tiene, además de darle un particular sabor a la bebida, que puede despertar la sospecha de quien lo consume (máxime si es suministrado sin conocimiento previo). Es mi deber recordar que aquello que se haga es regresado multiplicado por tres o más veces, por eso no es recomendable realizar hechizos de atadura. Hay que hacer como aconseja Sting, “si amas a alguien déjalo libre”, si regresa es porque te ama, si no, es porque nunca lo hizo.